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Más de 400 dominicanas ejercen la prostitución en Caleta Olivia
La cifra fue arrojada por la
asociación de dominicanos de la localidad. Lo informaron desde la
Subsecretaría de la Mujer. La mayoría de las mujeres son engañadas con
la promesa de un puesto laboral. Para permanecer en el país, deben
casarse o salir de la Argentina cada tres meses.
Lunes 18 Jun 2012
Pre-congreso Internacional de Trata de Personas en Caleta Olivia.
A fines
del año pasado, en Caleta Olivia se creó una asociación de hombres y
mujeres prevenientes de la República Dominicana, a fin de lograr una
integración cultural. El motivo de ello fue la discriminación que
sufren, principalmente las mujeres, al arribar a nuestro país, ya que en
la mayoría de las situaciones son traídas a la Argentina con la promesa
de un empleo, pero al llegar se encuentran con que la prostitución era
el objetivo de estas promesas.
El
viernes, también en dicha localidad, finalizó el Pre-congreso
Internacional de Trata de Personas, oportunidad en donde se dio a
conocer que más de 400 mujeres dominicanas ejercen la prostitución, sólo
en Caleta Olivia.
Según
informó la subsecretaria de la Mujer, Roxanna Totino, a La Opinión
Austral, los datos fueron proporcionados por las integrantes de la
asociación, “en el momento que las ayudamos con lo de la asociación,
ellas tenían los listados de las mujeres, porque debían clasificarlas,
para saber quiénes tenían la documentación al día y a las que les
faltaba hacer los trámites migratorios, que para ello necesitaban hacer
el certificado de antecedentes”, mencionó la subsecretaria. Cabe indicar
que esta asociación fue creada con el apoyo de la Subsecretaría de la
Mujer.
Sobre
las cifras arrojadas y la situación por la que atraviesan estas
mujeres, Totino mencionó que “es la realidad que les sucede a las
mujeres dominicanas y no sólo en Santa Cruz”.
Asociación
Sobre
la finalidad de la asociación integrada por dominicanos, comentó que
“la idea es difundir en su país que no es fácil para la mujer dominicana
trabajar en la Argentina y que casi siempre vienen acá siendo objeto de
algún engaño, además quieren capacitarse y difundir su cultura e
integrarse a la sociedad, ya la gran mayoría ha traído sus hijos y/o
familiares, lo que hace que de a poco se vayan integrando, ya que mandan
a sus hijos a la escuela, a practicar deportes y demás”.
Discriminación
“Lo
que ellas manifestaron la primera vez en público en Caleta fue la
discriminación que sufrían y que por ahí no lograban tener un trabajo
digno, esto básicamente les sucede a las mujeres, porque los hombres se
abren más fácil el camino y consiguen trabajo”, indicó la subsecretaria,
agregando que “en la asociación que se armó hay muchas mujeres
profesionales. Su presidenta logró salir de la prostitución y abrió una
gomería que ya tiene hoy una sucursal, ahí le da trabajo a otras”.
Llegada
Sobre
cómo es la llegada de estas personas a nuestro país, la funcionaria
mencionó que contraen una deuda con la persona que las trae “y hasta que
no pagan su deuda, no logran salir de la situación. Nos contaban que
una de las chicas, al regresar a República Dominicana, denunció a la
persona que la había traído y logró meterla presa”.
Otra
de las situaciones que se generan es cuando “sus familias hipotecan la
casa para poder pagar el pasaje para que su hija venga a nuestro país,
con la promesa de un buen trabajo que al llegar acá no es otro que la
prostitución, y una vez aquí se encuentran que están solas, con deudas
que pagar y con la posibilidad de que su familia en Dominicana se quede
sin vivienda, pues si no pagan, se ejecuta la deuda”, indicó.
Santa Cruz
En
relación al ingreso de ciudadanas dominicanas engañadas, Roxanna Totino
subrayó que Caleta Olivia “es la puerta de entrada a la provincia”,
pero luego migran hacia otras localidades, “depende muchas veces de cómo
lleguen y quién las traiga. A veces las que están establecidas invitan a
amigas a venir con la excusa del casamiento. Para quedarse en el país,
uno de los requisitos es casarse, ya que Dominicana no entra dentro del
Mercosur; la otra opción es salir del país y regresar nuevamente como
turista. Lo que hacen es ir a Chile y volver cada tres meses, la otra es
casarse”.
Finalmente,
la subsecretaria mencionó que “apelamos a la sociedad a que no
discrimine, que son mujeres que nos necesitan y más allá de las
circunstancias por las que están aquí, son parte de nuestra sociedad y
debemos bregar por su inclusión sin discriminarlas y darles
oportunidades de trabajo como a cualquiera que quiera habitar nuestro
suelo”.
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